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viernes, 29 de julio de 2011

…Entre dos mundos…!



Este es mi ángulo preferido,
donde las señales obtienen,
un significado excepcional,
donde las utopías y expectativas quedan,
para el que quiera conceptuar,
o para el que ansía germinarlas…

Este es mi cosmos…
mi azul perpetuo,
el lienzo de mis sueños,
los hechizos y las fantasías,
Como lo eres tú…

Océano e inmensidad,
azul en tus bordes,
besos infinitos,
perdidos en un edén,
con aroma a fogosidad,
que estremece mi cuerpo,
me entrega delicia..

Vienes a mí,
cual deidad del olimpo,
tras lo terrenal y lo celestial,
traes en tú aliento,
la efusión del deseo,
el juguetear de tus senos,
la transpiración a flor de piel,
el espasmo de la entrega,
el orgasmo del origen,
al primer concebir,
sin haber sido aún mía…

Eres leña al ardor,
fuego del espacio,
llevas el orden,
el seminario de los sentidos,
lenta, pausada,
disfrutando la continuidad…

Absorbes cada instante,
encegueces mi recapacitar,
bebo de ti…
Tú original avidez,
mientras las palabras,
dilapidan sus autenticidades,
y todo se ha vuelto,
una dinámica,
al amar en la entrega,
del deseo y del poseer…

Tú y yo,
en el soplo de un ímpetu,
en la imaginación de dos almas,
en el lenguaje universal,
concediendo expresas sensaciones…
en suaves y distendidos,
movimientos articulados,
donde tu mundo,
se alzó con el mío…

De tus palabras e inquietudes…
no codicio salir…
ahógame en tú deseo,
en ese palpitar,
que significa para mi…
Vivir entre dos mundos…

Príamo.

sábado, 2 de julio de 2011

… Los ángeles… No siempre tienen Alas…




Y te escondes…
Tras la delicadeza de una reflexión,
mientras tu voz se quiebra,
al centelleo de una mirada,
que en una estación,
perseguiste absorber,
y que ninguna vez,
lograste alcanzar…

Te carcomes los labios,
tú elipsis es trascendental,
no se humedecen las heridas del corazón,
en un arroyo de agua bravía…
No se desclavan los desvelos,
en una sabana,
de aturdidos insatisfechos,
cuando se trata de tú existencia…

Recorres tú creación,
entre suspiros sofocados,
de pequeñas callejuelas,
llenas de historias,
de ventanales ancestrales,
hierros enmohecidos,
y bohemios abrigar,
que el espacio enmudeció…

Una que otra partícula,
rueda la retentiva en tú rostro,
de que lo pudo ser,
y le negaste…
Por la avidez de un engaño,
por qué nunca especulaste,
que un juego,
llegara a tú alma…

Hoy tus días son dilatados,
privos de sentidos,
fríos y sigilosos,
desconsolados y extinguidos…
Una que otra mímica,
se aviva al repaso,
de un instante,
que siendo sortilegio,
en tú imaginación,
dejaste sucumbir,
por la cobardía,
de no aceptar tus errores…


La vida entrega muchas quimeras,
esta fue una entre tantas,
que por travesura quisiste corretear,
sin aceptar perder…
Hoy lloras tus recuerdos,
tus palabras y los hechizos,
que en un momento,
te hicieron radiante…
Y en tú finta edad,
seguramente volverás a revivir…


Los ángeles no siempre tienen alas,
pero tienen un paraíso en sus espíritus,
que solo puede ser alcanzado,
cuando un alma,
logra amar…
más allá de sus culpas,
y de sus pretendidas
habilidades…

Príamo.